Dolido, preocupado, impactado, con notable cuota de impotencia brindó una conferencia de prensa este Lunes sobre el mediodía Daniel Camacho, quien el Sábado a la noche 3 encapuchado ingresaron en su quinta mientras él había ido a buscar comida y le robaron una importantísima suma de dinero que no quiso precisar entre dólares, euros y pesos. “Le pusieron un revólver en la cabeza a mi hijo de 8 años para que mi mujer les diera la plata” contó llorando.
Como nunca lo vimos, sacado, nervioso, destruido, así mantuvo un encuentro con los medios de prensa el empresario Daniel Camacho, titular de Ayacucho Motors y de la estación de GNC que el Sábado por la noche, mientras él fue a un local céntrico en búsqueda de unas empanadas, 3 delincuentes encapuchados y portando armas de fuego, sorprendieron a su mujer Valeria Chobadindeguy, sus dos pequeños hijos y sus padres y les robaron una suma que no quisieron dar detalles pero como lo expresó el comerciante “fue el ahorro de 10 años de familia. Estoy en la ruina, no tengo peso”, dijo.
En su relato, el piloto de APAC contó “Estaban encapuchadas. No se decir detalles más. No hago política ni nada ni digo si están haciendo las cosas bien o mal. El único medio son ustedes y quiero que me protejan. Quiero que todo esto quede grabado porque voy a ser una víctima más. No me quedó un peso, piensan que entran a mi casa, que fabrico millones de pesos y no es así” expresó.
Sobre si los habían tratado con violencia, Daniel relató que “fue solo verbal. Les decían a mi familia -dónde está el hijo de puta de tu marido, lo vamos a matar cuando vengan, dale hija de puta sabemos donde está la plata, sabemos donde tenés todo-. Les pusieron a los chicos el revólver en la cabeza. Estoy pidiendo ayuda psicológica porque me parece que es más que una agresión verbal. Para los chicos será un cargo que tendrán todos los días. El nene de 8 años se orinó encima ayer, la madre durmiendo con él, la nena diciéndoles que no le hicieran nada a la madre (entre lágrimas)” relató más que golpeado.
Sobre la respuesta que tuvo por parte de las autoridades de Seguridad, agregó que “La verdad que fue la mejor. Acaba de hablar Pablo Zubiaurre con el Fiscal General de Dolores y está bajando para Ayacucho. Pero esto pasará 3 o 4 días, y después…vivo en el medio de la nada. Hay muchos empleados míos que no quieren seguir trabajando conmigo porque tienen miedo. No se allanó ni un solo lugar cuando fue el otro robo. Como puede ser que la misma fiscal me dice que en una semana hubo 4 robos con gente encapuchada, no hay dudas. En esta conferencia de prensa no quiero hablar mal ni de la policía ni del Intendente, sino que lo único que les digo es que corre riesgo la vida de mi familia y la mía; y de todos los que viven al lado mío. Quiero dejar aclarado que no quiero que se tome con un fin político. Ojalá se pueda esclarecer y recuperar lo que nos costó una vida. Hoy estoy fundido, no se cómo voy a afrontar porque realmente estoy acongojado, estoy mal, hace dos noches que no dormimos, sentimos ruidos de una paloma y nos parece que nos están entrando en nuestra casa. Creo que Ayacucho se está poniendo difícil. Cada vez que ustedes me hicieron una nota les dije que vivía en la gloria, que vine de la jungla (Buenos Aires). Estoy horrorizado” enfatizó.
También se le preguntó allí cómo es que había tomado la decisión de guardar una suma tan importante de dinero en su propia casa a lo que explicó “Esto es un ahorro de 10 años, yo no vendí un campo ni una casa. No fue un monto que se juntó en dos días. Fueron 10 años de trabajo. ¿Si vos juntás plata o dólares los ponés en un banco? Seguro que no. Si este país está en contra de todo eso. A mí me agarró El Corralito con 250 mil dólares y no los vi nunca más. ¿Vas a ir a un banco, al Banco Provincia que no tiene una caja de seguridad? Yo pensé en esconderla que pensé que era lo mejor para mí. Yo tengo entre 25 y 30 personas trabajando y los viernes hay que pagarles los sueldos, ninguno está atrasado en lo que cobra. ¿Cómo me manejo? ¿Voy a sacar plata de un cajero que te entrega 2000 pesos por día?” enfatizó.
Sobre el lugar que guardaba la plata, Camacho dijo que solo lo conocían “Mi hermano, mi señora y yo, y no les puedo dar más precisiones. Ni mi suegro sabía del monto de dinero ni del escondite. Era algo muy reservado, muy íntimo de la familia. Ha sido una persona que ha estado en mi casa, que conocía los movimientos. Son los mismos que entraron la vez pasada porque tenían datos precisos, que querían una escalera”, expresó para luego agregar que no sabe o sí de quien desconfiar “La fiscal me dijo que tengo que desconfiar de todo” dijo.
Por último, le consultamos desde Ayacuchoaldia.com.ar si tenía pensado irse de Ayacucho a lo que respondió “Hoy me levanté con ganas, pero no puedo deshacerme de todo. Plata no tengo más, muchachos… no tengo más plata. Me van a tener que llevar a mí porque yo no tengo un peso. Tengo que afrontar las deudas y que los proveedores me esperen. Hoy temo mucho por la salud de mis hijos, de mi señora, de mi entorno, la mía. Hoy no tengo un peso, me fundieron. Les fui a transmitir eso al Intendente, al Secretario de Seguridad, y a la Fiscal. No se que más tengo que tocar y llegar para que me ayuden. Le agradezco mucho al Dr. Ralli que están llevando a mi familia para ser asistidos por un psicólogo porque es un trauma que será difícil de sacar” concluyó mientras bebía un vaso con agua y respiraba fuerte. Estaba quebrado y no es para menos.
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