Realizada 6-1-2021. En nuestra primera nota de 2021 referida a ayacuchenses que viven fuera de nuestra ciudad, tenemos hoy la posibilidad de conocer y saber de la vida de un médico especialista en cirugía cardiovascular, que se fue de la ciudad y abrió su propio camino formando una hermosa familia con enorme sacrificio. Hijo de un conocido matrimonio de nuestro pueblo, nos vamos a La Plata, para tener un mano a mano en el diario digital www.ayacuchoaldia.com.ar con el Dr. Pablo Arenaza.
A. al D; Hola buen día, gracias por aceptar dialogar con nosotros, y comencemos por recordar cuánto hace que te fuiste de Ayacucho y cómo se compone tu familia…
De Ayacucho me fui en 2004, con 18 años, para estudiar medicina en la Universidad Nacional de La Plata (UNLP). Me recibí en 2009, luego hice la residencia de cirugía cardiovascular (6 años). Vivo con mi mujer hace 7 años.
A. al D; ¿Querés contarnos quiénes son tus padres, para que la gente te relacione?
Mi mamá es Marta Escudero y mi papá Néstor Arenaza.
A. al D; ¿Dónde vivís y a qué se dedican actualmente?
Vivo en La Plata, y soy médico especialista en cirugía cardiovascular, trabajo en el hospital San Juan de Dios, Hospital Español y el hospital Durand de Capital Federal. Además soy Instructor de residentes de cirugía cardiovascular y Profesor de la catedra D de cirugía de la Facultad de Medicina de la UNLP.
A. al D; ¿Cómo es la realidad hoy en la ciudad dónde están?
La ciudad es muy linda y tranquila. En cuanto a la pandemia, los casos están aumentando, algunos comercios, luego de la cuarentena obligatoria comenzaron a abrir, los que pudieron, pero lamentablemente muchos otros cerraron definitivamente. Actualmente disminuyeron mucho los cuidados, la mayoría de las personas en la calle no usa barbijos ni respetan el distanciamiento social.
A. al D; ¿Qué cosas se han modificado en tu vida con la pandemia?
Prácticamente se medicó todo. Por ejemplo en el ámbito laboral con todas la medidas que se toman. Respetando todos los protocolos lleva mucho tiempo prepararse para atender a cada paciente, hay algunas cirugías que se realizan de urgencia sin saber si el paciente es positivo o negativo y se deben tomar muchos recaudos ante un eminente contagio. En un comienzo la escasez de insumos fue un tema de mucha preocupación. En el ámbito familiar y amistades, un poco angustiante, solo en contacto a través de videollamada o por teléfono para saber cómo se encontraban.
A. al D; ¿La situación va mejorando en tu ciudad?
La situación había mejorado mientras se respetó el aislamiento social, preventivo y obligatorio, pero actualmente está emporando con aumento de los casos.
A.al D; ¿Cómo es un día de ustedes hoy?
Diariamente salgo a trabajar a los hospitales, generalmente realizo alguna cirugía y luego vuelvo a casa, tomo todas las medidas para evitar llevar el virus. Mi mujer casi no sale de casa, ya que tiene la posibilidad de trabajar desde allí. Tratamos de unificar las compras para salir lo menos posible.
A. al D; ¿Qué te parece cómo fue el año en el ámbito de la educación?
Mi mujer es profesora de educación secundaria y pude ver que fue una tarea ardua y compleja, tanto desde el lado de los alumnos como de los profes, quienes tuvieron que adaptarse a la virtualidad de un día para otro. En mi caso, siendo profesor de la catedra de cirugía, tuvimos que dar las clases, que normalmente son prácticas, por videollamadas, fue lo que se pudo hace, pero no es el ideal, no se pudo enseñar en la cama del paciente demostrando y aplicando los conocimiento en casos reales.
A. al D; ¿Cómo funcionan los comercios? ¿En qué horario pueden salir ustedes?
Los comercios funcionan tomando las medidas de seguridad, te toman la fiebre y rocían con alcohol al ingresar y tienen restricciones de cantidad de personas dentro. Los horarios son normales, sin restricciones.
A. al D; ¿Te hizo ver o te sirvió para tomar las cosas de otra manera este fenómeno?
Toda esta situación, me hizo valorar mucho más las cosas simples de la vida, como poder ir a vestir a mi familia cada vez que quería, juntarme con amigos, tomar mate, salir a caminar sin tener miedo de contagiarme.
A. al D; Hay gente que cree que la cuarentena ya fue suficiente ¿Qué te parece a vos y tu entorno?
La cuarentena todavía no es suficiente, mientras no se tome conciencia de la gravedad y hasta que no se realice una vacunación masiva, todos deberíamos realizar una cuarentena voluntaria, para evitar que aumenten los casos y se sature el sistema de salud. Actualmente no se respetan las medidas y lamentablemente creo, en mi opinión, que van a crecer los casos inevitablemente.
A. al D; ¿Cómo actúa la gente, pensas que todos entienden lo que vivimos?
En un principio de la cuarentena, la gente respetó mucho, no se veía gente en las calles, las personas andaban de barbijos y respetaban el distanciamiento social. Pero en estos últimos meses la gente dejo de tomar medidas preventivas, yo creo que entienden qué pasa pero subestiman lo que ocurre hasta que les toca, o tiene contacto con algún caso cercano.
A. al D; ¿Qué se extraña a la distancia, asados, reuniones, comidas, familia?
Extraño mucho viajar para estar con mis seres queridos, ver a mis sobrinos, es duro verlos como crecen por una cámara, las reuniones, los cumpleaños.
A. al D; ¿Pueden venir cada tanto o como te relacionas con tus seres queridos?
Desde marzo no pude ir hasta los primeros días de diciembre, y luego fui también para las fiestas. Pude ir con tranquilidad dado que en mi trabajo todas las semanas me testean, igualmente tomé todas las medidas de seguridad para cuidar a mi familia.
A. al D; ¿Mantenés contacto con tus amigos de siempre, con ayacuchenses?
Perdí mucho el contacto con mis compañeros, ya que cuando me vine a La Plata no era tan sencilla la comunicación.
A. al D; ¿Qué significa Ayacucho para vos, que recuerdos o afectos guardas de nuestra ciudad?
Ayacucho para mí son mis raíces, me recuerda a mi infancia, mis abuelos, mi familia, ojalá algún día pueda realizar algún aporte desde mi especialidad a la ciudad.
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