El maíz temprano necesita lluvias de manera urgente para mejorar su condición en gran parte de la zona núcleo, donde su estado avanzó más hacia regular y malo. La soja de 1ra también se deteriora: un 19% está regular a mala y también reclama por lluvias.
Las proyecciones agroclimáticas de la Bolsa de Comercio de Rosario ponen una nueva alerta sobre el clima para las próximas semanas, lo que podría afectar fuertemente a los maíces tempranos sembrados en la región, e incluso a la soja de primera.
El consultor de la BCR, Alfredo Elorriaga, según los análisis de datos climáticos estudiados para el mediano plazo, indica que desde el lunes 13 de septiembre las temperaturas ya podrían superar los 36 a 38°C en la región, y estos registros podrían ser superiores en el sector sudoeste de la zona GEA.
“Seguimos en un evento Niña. El enfriamiento actual es cercano a –1ºC lo que supera el rango de Niña débil (de –0,5 a –0,9), y, según los modelos confiables, será así por lo menos hasta finales de febrero”, subrayó.
Ante este escenario climático, la gruesa tiene un panorama muy complicado. En lo urgente, el maíz temprano es el más comprometido. La falta de lluvias desde mediados de diciembre, incluso desde mediados noviembre en algunas zonas, dio un vuelco negativo a las buenas proyecciones en la siembra y actualmente el 45% de los cuadros presenta condiciones de regulares o malas. El resto sigue bueno, pero con señales de alerta si no llueve.
Desde la BCR destacan que “el sur de región núcleo es la zona más afectada por la sequía: todos los cuadros están entre regulares a malos. Los mejores maíces están en el noroeste, allí las expectativas se mantienen pero alertan por problemas de falta de agua”.
Es así que muchos cultivos podrían resistir una semana más sin agua, pero si no llegan precipitaciones pronto, tanto los maíces tempranos de octubre como los tardíos pueden ver comprometidos sus rendimientos.
En el caso del norte bonaerense, donde este año se apostó más al maíz, hoy tiene a casi el 100% de los lotes en condiciones regulares o malas. Según la BCR, también en el noreste, el 85% de los cultivos se encuentra en mal estado con rendimientos que se desplomaron entre un 30% a 70%.
El maíz tardío entra en el período crítico con estrés hídrico
En su mayoría aún en estado vegetativo, pero próximos a floración, los maíces tardíos están ingresando en período crítico bajo un fuerte estrés hídrico en el sur de región núcleo y con reservas ajustadas en el resto del territorio. En Junín y alrededores, los cultivos fueron sembrados con poca humedad y si no hay lluvias significativas en las próximas semanas, alertan que las expectativas pueden caer por debajo de los 50 a 60 qq/ha.
La soja se deteriora y el potencial de rinde tambalea ante la falta de agua
En los últimos 20 días, la condición de la soja de primera ha mostrado un notable deterioro en el norte de Buenos Aires y el extremo sur de Santa Fe, afectada por la falta de lluvias. Según la Bolsa de Comercio de Rosario, en la región, el 19% de los lotes presentan condiciones regulares a malas, el 49% se encuentran en buen estado y el 32% está en condiciones muy buenas.
Sin lluvias y con una posible ola de calor a la vista
En los últimos siete días las lluvias estuvieron recostadas sobre la franja oeste del país. El sudoeste de Córdoba y San Luis recibieron acumulados significativos, entre 10 y 70 milímetros, con algunas tormentas localmente severas. En la región núcleo se midieron 11,6 mm en Bengolea. El NOA también recibió precipitaciones por encima de los 40 milímetros, con un valor poco común para Jujuy, superando los 100 milímetros.
Para el resto de la región pampeana y el NEA, sigue sin llover al menos desde que comenzó el 2025. Las reservas de agua en el suelo han caído significativamente, sobre todo en el centro este de la región pampeana: el norte de Buenos Aires requeriría lluvias de 100 a 120 mm para salir de la condición de sequía.
Se descartan la llegada de lluvias significativas hasta el 20 de enero, se pronostican mínimas que pasen de los 11 a 17°C, que tuvimos en la semana, a valores de 20 a 23°C, o incluso más a partir del martes 14. Las máximas pronosticadas para el lunes 13 van de 36 a 38°C. Lamentablemente, la próxima semana es probable que la región deba afrontar el paso de una ola de calor, sin el auxilio de tormentas importantes.
Elorrriaga dice al respecto: “Los pronósticos de corto y mediano plazo no son optimistas para la primera quincena de enero. No se esperan eventos pluviales significativos y, seguramente, durante el fin de semana las temperaturas experimenten un fuerte ascenso y una mayor continuidad, reduciendo considerablemente la amplitud térmica que sirvió de alivio durante diciembre”.
N. de la R; fuente Todoagro.com
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