Con emotivas palabras y durante los 7 minutos finales de su último programa en Radio Cristal, Santiago Silva anunció su alejamiento del periodismo por razones “personales” y de común acuerdo con las autoridades de la emisora en la que se desempeñó por más de 30 años.
“Llego el momento de dar un paso al costado de la actividad periodística en esta casa y en esta radio, entendiendo que hay etapas que se cumplen”, comenzó diciendo el conductor al final de la emisión de su último envío.
El periodista contó que “hay que aceptar que el ímpetu, el entusiasmo, las ganas, las motivaciones por ahí flaquean en ciertas circunstancias y entonces hay que darle lugar a gente más joven, con intenciones de generar cosas nuevas, con contenidos que sean novedosos y salir un poco de la cotidianidad que nos marca la agenda periodística del día a día a la que uno sigue estrictamente y es difícil salir”.
“Evidentemente no fue una decisión fácil de adoptar, esta de dejar la radio a partir de hoy, porque cuando uno está habituado en desempeñar una tarea y una función con horarios determinados, la agenda establecida, la certeza de una situación económica que ayuda más o menos a vivir dignamente no es sencillo cambiar. Hay muchas cosas en juego y uno tiene que evaluar los pasos a dar para no equivocarse y no generar daño a uno mismo y a la gente que a uno lo rodea”, prosiguió en su mensaje despedida.
“Uno debe agradecer en principio a esta casa en nombre de Carlos Oroquieta, su director propietario, porque pensó en su momento que nosotros podíamos encarar este proyecto hace mucho tiempo y que ha perdurado durante tanto tiempo. Uno debe agradecer haber podido trabajar con absoluta libertad. Hay que decirlo. Nunca, pero nunca se nos objetó una opinión, ni se nos puso obstáculos para entrevistar a alguien proviniera de donde proviniera”, mencionó.
“Trabajamos coordinadamente en algunos temas puntualmente que creíamos debían abordarse con algún poco de mayor profundidad y que a veces la mayoría de los medios no lo tienen en su agenda”, dijo.
A la hora de los agradecimientos lo hizo extensivo “a muchos hombres y mujeres que han pasado a lo largo de estos años acompañándome en esta casa”.
Y siguió: “sintetizar en mis actuales compañeras de trabajo Alejandra Alfaro, Morena Agüero y la entrañable Olga (Tedesco) con quien he compartido estos más de 30 años de labor y que serán quienes van a continuar en esta casa a partir de mañana”.
“Agradecer a la familia, especialmente a Mariana, a mis hijos, a mi nieta por el sostén que han significado para que uno pudiera desempeñarse con la mayor libertad posible, con el mayor tiempo puesto a disposición a este trabajo”, dijo.
“Agradecer a los comerciantes que con su aporte sostienen a todos los medios de comunicación y a este querida y entrañable radio”, agregó.
Pausado, con voz por momentos entre cortada, Santiago Silva también agradecido a los entrevistados de tantos años: “agradecer a todos. Piensen como piensen. Hayan dicho lo que hayan dicho” porque “sin ellos obviamente la radio no tendría sentido”.
En otro tramo aseguró que el rol en la radio fue un trabajo que no es ni más ni menos sacrificado que otros. No es una tarea que demande un gran desgaste físico, sino uno no lo hubiera elegido quizá, pero si ha requerido una gran responsabilidad”.
“Dicen que el Cementerio está lleno de imprescindibles y si bien puede resultar impactante, pero la vida continúa y serán otros y otras los que sigan al frente de este programa seguramente con nuevas ideas, con más fuerza y con la misma responsabilidad con la que uno intentó hacer su trabajo”, puntualizó.
Silva este jueves durante su último programa señaló que “una despedida que requiere hacer un repaso de lo hecho y lo no hecho, y ahí la única satisfacción es que he desempeñado mi labor con mucho compromiso, con mucho ahínco y fundamentalmente siendo fiel a mi forma de pensar”, y sin haber “traicionando mi ideología”. “Siendo absolutamente franco y no esconder mis intenciones a la hora de brindar una información o dar a conocer mi opinión en diferentes temas”.
“Nadie o casi nadie podrá reprocharme que no han tenido la chance de expresar aquí lo que opinan. Lo que pensaban, aunque incluso sea diametralmente opuesto a lo que uno entiende que es lo que debe ser”, planteó.
“Una de las mejores enseñanzas y los mejores regalos que el trabajo de la radio puede dar es ese contacto fluido permanente y muy cercano y que la radio permite entre los que estamos de este lado y los que están del otro lado”, reflexionó.
“La inmediatez que la radio tiene no la tiene ningún otro medio de comunicación. Ni televisivo, ni gráfico. Porque si uno dice que tenemos un día con cielo despejado y no es así, inmediatamente alguien te llama para decirte que tenes que corregir lo que estás diciendo. Ese contacto de inmediatez es único y maravilloso”, describió.
“Hemos intentado hacer nuestro trabajo con honestidad intelectual y con respeto. Especialmente por quienes nos escuchan que son quienes nos sostienen. Ojalá lo hayamos logrado”, señaló.
Sobre su paso al costado dijo que se trata de “una salida que tienen que ver con cuestiones de índole personal y en los mejores términos”. Tal es así que “me han ofrecido que en el futuro si las condiciones se dan o si los avatares de la vida nos llevan por diferentes caminos podemos volver” porque “el que se va sin que lo echen vuelve sin que lo llamen” aseguró.
Aclaró que la salida “se adoptó por propia voluntad” ligadas a “cuestiones personales” y “con un montón de aspectos”.
Y cerró: “las muestras de cariño hasta incluso de dolor que he recibido esta mañana me hacen pensar que nuestro paso no fue en vano, que alguna cosa habremos dejado”.
N. de la R; fuente La Nueva Verdad de Rauch.
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