Gran triunfo se trajo Atlético en la noche del Viernes 1 ante Independiente de Tandil desde el mismísimo Agustín Berroeta. En un partidazo, lo superó 3 a 2 para reencontrarse con su fútbol, con su valía, con su jerarquía individual que hace 3 años lo llevaron a quedarse con el Torneo de la URD. Los goles fueron marcados por Aguirre en el primer tiempo y sobre el final del juego, en tanto que un disparo en la primera parte desde lejos de Juan Pablo Vicente dio en un marcador y señaló lo que era el segundo.
El partido se jugó con una intensidad bárbara, con mucho ida y vuelta, donde la visita mostró claramente una intención de presionar, de ahogar al local, de cortar todo circuito ofensivo, con el despliegue del pibe Ponce, y con la velocidad que le daban por fuera Montalivet y Olavarrieta. Ya desde los primeros minutos, a quien se lo veía conectado y participativo, totalmente compenetrado con el equipo era a Julián Aguirre.
Fue él mismo quien capturó una pelota mal rechazada en el punto penal para marcar el primero y luego, siguiendo con la misma tónica, sin que Martiarena sufriera en su arco, llegó el segundo con un disparo de Vicente.
Atlético empezó a quedarse sin nafta sobre el final de los 45 y llegó el merecido descuento por Franceshetti; y ya en el segundo tiempo, ni bien arrancó el goleador Parolari colocaba la igualdad.
Parecía que el local lo daba vuelta pero reaccionó el equipo de Gómez, con mucho coraje y entrega, la pelota la tuvo nuevamente y sobre el final, el implacable goleador Julián Aguirre logró sobre los 43 darle el grito final a Atlético festejando y desahogándose tras varios resultados que no lo favorecían, además de reencontrarse con su juego y entrega.